Anoche era mi día de Vogue. Llevaba meses esperando ese momento, y hasta me había puesto una faldita y algo parecido a un collar. Pues al final mi gozo en un pozo. La gente no tenía ganas de fiesta y nos quedamos en la Zubia, lo cual no habría sido tan malo si el Zeppelin hubiera estado abierto. Pero tampoco. Acabamos en el Túnel, que antes me encantaba, y que ahora se ha convertido en un sitio de música comercial (el puto Umbrella ese me persigue, Dioooorrrr), y en fin...La verdad es que se me pasaron las ganas de fiesta. Empecé a meterme en mi mundo inopiáceo, de donde, como entre, ya no salgo, y estuve pensando en las nuevas generaciones, en cómo hemos evolucionado nosotros y todas esas cosas...y acabé rayaílla y me fui a casa.
Hoy es el cumple de Pe (¡felicidades duendecillo!), y no sé si habrá algún tipo de celebración o si se pasará a la semana que viene... El sábado hay concierto de Macaco y Son de Nadie en el Zaidín, gratuito, así que, a quien le interese que se pase. Después de eso espero poder ir a la Vogue...
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