Bueno, tal vez habría sido mejor ponerle otro título a este post, algo así como "El fin de semana de Curro", o mejor aún, "Curro y sus curretiñas", porque vaya tela...Entre su futuro viaje a Finlandia a trabajar en una productora porno, su "técnica de la pierna", los cariñosos besos que profesó a Isaac, Alfonso y Carlos, y las proposiciones que le hizo a Ernesto en el Zeppelin el viernes, ha dejado de ser Curro para pasar a ser Quagmire (de "Padre de familia") y le hemos adjudicado el grito de guerra de "¡Toma, toma, toma!", jejejejeje...
Mientras tanto, en la otra parte del mundo, Cájar city, hogar de aquellos que Carlos bautizó como "cajarauis" unos pocos elegidos veíamos el final de la primera temporada de Héroes y el comienzo de la segunda. La primera me ha encantado, pero ésta está siendo demasiado lenta para mi gusto. En fin, ya veremos cómo sigue.
Y bueno, anoche hubo cena de gala en casa Chemisana, con sus manteles, copas de lujo, salpicón de entrante, almejas, tablas de quesos y patés, y de plato principal chuletón de ternera con salsa al roquefort y de lambrusco, champiñones y no sé qué más. Una pasada vamos. Todo regado con vino y posteriores cubatas, of cúrs. Y digo yo, que en vez de los 30 leuros que vamos a desembolsar en nuestra cena de grupo del día 28, podíamos dárselos a Chemi, que cocine él y que lo que sobre se gaste en bebida a punta pala.
En fin...Y en cuanto a mis paranoyas, ahí siguen. Pero esas son mías y sólo mías.
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