viernes, 15 de marzo de 2013

Dejad que la poesía vuelva a mí

Vivo despacio sin ti,
sin ti mis horas son largas,
debo a tu ausencia una vida
que no sé con qué llenarla.
Lentamente, como yedra
que no veo crecer, avanza
el tiempo sin ti, cubriendo
inquietudes y esperanzas.
Para que mueran sus flores
todo un otoño hace falta,
otoño que nunca llega,
horas que el viento no arrastra.

Manuel Altolaguirre. "Vacío". Poesías completas.

Descubrí a este poeta andaluz allá por 7º de EGB gracias a la biblioteca del colegio, biblioteca que probablemente fui la única alumna que visitó por iniciativa propia. Quién iba a decirme que unos pocos años después, 2, para ser exactos, me pasaría las noches pegada a un programa radiofónico de poesía en Barbate llamando par recitar estos y muchos otros versos, escribiendo los míos propios e incluso yendo al estudio un par de veces con unos amigos a leer en directo nuestras poesías. Cuánto ha llovido desde entonces...

Ahora, hace años que no leo poesía, supongo que cada cosa tiene su momento. Sin embargo, ayer me enseñaron unos versos de Cortázar que me hicieron recuperar esa sensación que tenía antes cada vez que leía algo de Benedetti o, por qué no decirlo, de Lorca, cuyos "Sonetos del amor oscuro" me regalaron interminables noches de pavera juvenil.

Es cierto que ya no tengo las ganas ni el tiempo de sentarme a leer poesía durante horas, pero unos versos de tanto en cuanto tampoco me harán daño. Retomemos viejas costumbres: dejad que la poesía vuelva a mí.

No hay comentarios: