Para aquellos que no lo sepan, mi dulce hermanita, mi bomboncito rubio, está aquí de visita, ¡sí! La pequeña nórdica llegó el jueves y se queda hasta mañana, y en estos días le estoy dando cantidades ingentes de besos y abrazos, con lo poco que a ella le gustan, jajaja!
El jueves estuvimos de tranquis por Oporto, y el viernes buscando un regalo para Nando, que cumplía años el viernes. Tenía que ser un libro de alemán, que para eso le estoy dando clases, y no fue nada fácil de encontrar...Esa noche fuimos al Guincho, con intención de tomar una cerveza, darle el regalo e irnos, porque su novia estaba allí también y no iba a ser una situación muy cómoda, pero al final le echamos cara y nos quedamos hasta las 6, bastante contentas de más y habiéndonos reído lo indecible. Esa noche Nando me presentó a su hermana, que sabe todo lo que hay, y también hizo gala de su gusto por la adrenalina. En fin...
Sábado un poco de turisteo y por la noche cenita en turco, visita al Altar y a la Tendinha. Alemanita con ataque de alergia no aguantó demasiado...Conocía a un africano-danés que daba clases de percusión africana mú simpático y a su agente portugués, nmonísimo, ex-surfista, que había estado muchos años en España. Y en la Tendinha me encontré, tachán tacháaan, a Jenny, una compañera de clases de Berlín, alemana, que está pasando unos días de vacaciones aquí. Mañana nos tomaremos un cafelito.
Y ahora a currar, vayamos a que me echen. Mañana más, pero no mejor.
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