Y ya van 24

Bueno, pues a las 3.30 de la mañana y en plena lucha contra los mosquitos que me están devorando por todos lados, escribo mi post de cumpleaños.
Señoras y señores, ¡Alemanita acaba de cumplir 24 dulces primaveras! Quién lo diría, ¿verdad? Pues para celebrarlo mañana tengo que dejar mi habitación, lo que implica levantarse a las 8, sacar dinero, enviar mi paquete de 12 kilos a España, comprar una maleta, llenarla de cosas, tirar la mitad, limpiar la habitación, depilarme y sacar tiempo para emborracharme. Antes me ha sorprendido Marcel cuando he ido al baño, me ha dado un abrazo, me ha felicitado y me ha dicho que "los regalos, mañana". ¡En plural! ¿Qué serán? Yo he pedido un striptease, pero igual no cuela...
En fin, que ya os contaré.
¿Cómo me siento? Pues bien. A punto de acabar la carrera, sabiendo cada vez más lo que quiero y lo que no, y apenada por tener que dejar mi cuarto precisamente ese día. Pero bueno, Christian me ha dicho que por supuesto puedo dormir en su habitación mañana, y después creo que me quedaré en la de Christoph, que está en su ciudad. René se empeña en que duerma en la cocina, pero como que paso...
Pos nada. Que un año más vieja. Ya iré contando más cosas a lo largo del día, que seguro que da para mucho.
Y antes de que se me olvide: es probable que a partir del 31 no tenga más internet hasta el 20 de agosto que llegaré a Granada aprox. Puede que pille algún ratejo un ordenador, pero poco más. Si queréis algo importante, el móvil alemán estará activo hasta esa fecha, y el español también. Ala, ¡a cuidarse!